Pues bien...aunque parecía que tardaba...por fin llego el fin de semana.
Un respiro al día a día acelerado y mas este en el que de una manera u otra, muchos alargaremos el descanso (relativo) y si este no llega, al menos si...la desconexion.
La verdad es que (sin querer dar envidia) estoy en modo estres, pero un estres sano, por organizar una maleta de mano con ropa de invierno. Escapamos al norte de Europa y yo con lo mala que soy haciéndola, me da a mi...que tendré que absorber parte del espacio de la de Toño. La verdad que en esto, tengo que hacer un master, ¿soy la única que para un fin de semana se lleva casi el baúl de la pique? jejejej
En fin...mientras llega la hora de marchar, y de disfrutar de un poco de espacio y serenidad, la verdad es que hoy os traigo un piso que despierta en mi un poco de contradicción, y otro de admiración.
Un #hometour delicado, femenino pero a su vez frío y algo vacío.
Esto ultimo se debe a que efectiva,mente es una vivienda en venta, y el estilismo empleado nos muestra los espacios, pero a falta de esa vida que lo hace material.
Pero aun con ello, la verdad es que este espacio, me resulta admirable.
Sus colores suaves, sus formas delicadas y una iluminación completamente de protagonista hacen que a su vez, sea casi para dejarlo así. Sin artificio, dejando como protagonismo a esas piezas que le acompañan.
Sus lamparas de filamento me parecen perfectas porque aportan un color cálido, y en la cocina y en el dormitorio, integran la perspectiva, llevándonos a engaño.
¿Veis el espejo de la cocina? ¿o es una ventana? Descubrirlo y contadme que os parece.
Por ultimo os deseo un muy feliz PUENTE, disfrutadlo, y aprovechar para impregnaros de la navidad (que esta a la vuelta de la esquina)
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